viernes, 16 de abril de 2010

Camino a Monterrey IXIV (FIN)


El teniente Javier sentado en uno de los asientos del avión, nos esperaba con una mirada temeraria, sentía yo que la felicidad se me escapaba de las manos, no había nada que hacer, el nos había al fin podido atrapar, y imaginaba mi vida con José, aunque sentía que mi amor por el, no disminuiría, y lo apoyaría todo el tiempo.
Javier nos miro y dijo:
_Janet, cometisteis un error.
_lo se, pero no me arrepiento. Sabes que amo a José.
_si, lo se Janet, pero no desistes robarme uno de los pasaportes, cuando supe que me faltaba uno, fue cuando me di cuenta que algo estaba pasando.
_lo se, fue algo entupido, pero a hora que va a pasar.

José estaba en silencio, sin decir una sola palabra, aun adolorido por los golpes.

_ya sabes que va a pasar, tú y José, se viene conmigo a la delegación policial.
No puedo dejarte ir, lamento mucho todo esto, pero tú acabas de tirar toda tu vida a la basura.

José se acerco a Javier, y le dijo:
_por favor, llévame a mi, deja a Janet fuera de todo esto, voy a decirte todo lo que se, pero quiero que Janet quede limpia de toda esta mierda, bien sabes que ella, no tiene culpa alguna.

_cuando me robo el pasaporte, ya tiene culpa.

_te lo suplico, perdí a mi familia una vez y sufrí mucho, no quiero que Janet sufra por ese error.
Javier me quedo mirando, dudo un poco, esta bien te prometo que Janet quedara limpia pero tu te bienes conmigo, vale.

_esta bien.

Yo no podía creerlo, todo estaba saliendo mal, no quería ver a José en la cárcel, su caso era muy especial.
Javier, Javier, por favor, no te lo lleves, Javier, te lo suplico, déjanos ir.

_no me pidas eso Janet, es mi deber como policía, detenerlo.
_sabes que es inocente, sabes que no ha cometido crimen alguno. Si llega a comisaría, los de ETA lo mandaran a matar, y lo sabes.
No podrás protegerlo dentro, por favor Javier.

_me pides demasiado, simplemente no puedo.

_Janet mi amor, mírame, (José, me tomaba las manos, y me besaba con dulzura).
_Janet vamos a estar juntos, tu me salvaste de esta ira, que me mataba por dentro, en tus ojos yo volví a encontrar la paz que necesitaba para vivir, no quiero verte llorar, no importa lo que me pase a mi, lo que importa es que, te conocí, y eso ha sido algo maravilloso, te amo.

_yo también te amo, no quiero que te hagan daño, no quiero perderte, me muero si te pasa algo.
_se fuerte mi amor, me distes mucho y a hora solo quiero que seas fuerte, por los dos.

Ya estábamos bajando del avión, cuando Javier nos detuvo, nos miro a los dos, y se sonrío. Extendiendo el pasaporte, nos devolvía la libertad.

_será mejor que corran o perderán su avión. Mantendré tu identidad anónima, imagino que muchos de esos amigos tuyos, intentaran buscarte, pero si te creen muerto, creo que te dejaran vivir en paz. En cuanto a ti Janet, sabes que cuando vuelvas al Perú, siempre podrás contar conmigo, me hubiera gustado, que te enamoraras así de mi, pero no fue, cuida a tu amor, y no dudes en llamarme si necesitas algo.

Con lágrimas en los ojos, di un salto de felicidad, y abrasé a Javier. Gracias gracias gracias, siempre te lo agradeceremos, le bese las manos, en señal de agradecimiento, mientras José le extendía la mano, y el respondía el saludo.

_a hora vayan, y no vuelvan al Perú, hasta que todo esto se haya olvidado.
_así lo haremos.

Corrimos hacia la entrada del avión, que significaba la libertad para ambos, voltee a mirar a Javier, que me hacia una señal, de militar, José, también se volteo, y se despedía.


El vuelo a Madrid, fue muy largo, pero no importaba, estaba al lado del hombre que amo, y la felicidad otra vez me hinchaba el pecho, sentir así de cerca de mi amado, cuantos besos dulces y caricias.


Hoy después de 10 años, me decidí a contar mi historia de amor, José y yo nos casamos, a hora se llama Luis Carlos, tenemos 2 niños, y nuestro buen amigo Javier, se caso con una ex compañera de prensa.

Las islas canarias son a hora nuestros refugios, nunca olvidare la forma que me enamore de mi esposo. En ese camino a MONTERREY.que nos unió y según se, sigue uniendo a muchas parejas, así que si aun estas solo en el mundo, haz el camino a monterrey, nunca se sabe que encontraras en sus pasajes, siempre hay un amor a la vuelta de un risco.
FIN

lunes, 12 de abril de 2010

Camino a Monterrey IXIII (1CAPITULO FINAL)

Ya sentados en el avión, José me tomaba las manos, y me abrazaba, a hora sentía que me protegía.

_José
_Dime Janet.
_Estas bien
_ ¿Te refieres que si ya recupere la memoria?
_Si, dímelo
_Si, Janet, ya todo lo recordé, pero aun hay detalles que son borrosas.
_Cuales, que dudas tienes
_Me recuerdo que cuando te marchasteis, en el helicóptero de la cruz roja, vi que se aproximaba otro helicóptero, pero solo lo vi un instante, después desapareció, los otros hombres me tomaron prisionero, me golpearon y me arrastraron muy lejos, me ataron de piernas y manos, me amordazaron, y me iban a tirar un tiro en la cabeza, pero nuevamente apareció el helicóptero, el que estaba a punto de dispararme, solo me dio mas patadas, y me dijo, que no gastaría sus balas, en una basura como yo, que luego vendría a matarme.
(creo que al ir a buscarme, me salvastes la vida, sabes, si no, no me hubieran llevado mas lejos a darme esos golpes,....... te debo mi vida)

Pero no volvió, luego de eso, todo era confusión, escuchaba estruendos parecía que estaba en medio de una guerra, luego de eso perdí el conocimiento, cuando veía que la nieve me cubría por completo, pensé que iba a morir.

Después desperté en la cama de esas personas, con vendas en la cabeza, deliraba tu nombre.
La niña me cuidaba muy bien, era muy cariñosa conmigo, toda la familia se porto muy bien sabes.
_Lo se José, todos ellos han sido unos verdaderos ángeles, que te han cuidado.
_Por que me cuidaban tanto Janet.
_Quizás por que, hace mas de 3 décadas la ciudad de Huaraz, sufrió un alud, todo un pueblo murió, desde ese día, los huarasinos, son personas muy nobles, siempre ayudan a todos, y mas a los turistas. Es algo que tienen de especial sabes.

_en mis pensamientos siempre estabas presente, soñé contigo todo el tiempo que estuve delirando.

_en el aeropuerto de lima, quizás nos arresten José. Tenemos que estar preparados, no te dejare solo, se que eres inocente, tenemos que dar la cara, no huiremos mas.



Al llegar a lima, lo primero que hice, fue llamar a mi madre, ella estaba esperándome en el mismo aeropuerto, con mis otras maletas, y los pasajes a Madrid, España.

_madre madre.
_hija mía. Ven dame un beso
_madre este es José.

Mi madre lo abrazo, como si se tratara de un hijo mas, lo miro y le dijo:
_la vida no me dio mas que una niña, una hijita que es la luz de mis ojos, a hora es una mujer, y espero que tu siempre veles por esa luz que a hora, te llevas a España.

_José la miro, y le respondió, no se preocupe mama, le prometo que con mi vida he de cuidar a su niña, es muy buena, un ángel, que me ha salvado.

_claro que si, es mi niña, a hora tú también eres mi hijo, abraza a tu nueva mami.

Intervine, esos dos no paraban de hablar de mi, como se fuera una pequeñita, y me ruborizaba.

_Basta madre, por favor.

Ambos se empezaron a reír, yo esperaba ver a Javier cerca, pero no estaba ahí, y eso era raro, pero ya estábamos justo sobre la hora de la llamada, para salir a Madrid.

_ATENCIO DAMAS Y CABALLEROS, DEL VUELO 509 CON DESTINO A, MADRID ABORDAR POR LA SALA SUR.

- ATTENCIOON PLES LADIES AND GENTLEMEN …..
MADRID
Ya era la última llamada, estábamos cerca de la libertad, teníamos que subir a ese avión, y todo habrá terminado, ya no huiríamos mas, estaríamos toda la vida José y yo juntos.

Nos despedimos de mi madre, y subimos al avión, cuando estábamos dentro del avión..... estaba esperándonos, el teniente Javier.

domingo, 4 de abril de 2010

Camino a Monterrey IXII (2CAPITULOS FINALES)

José, lentamente se aparto, y me toco las mejillas,
_ ¿por que lloras’?
_DE FELICIDAD
_me amas Janet.
_si, te amo José, con toda mi alma, y lo único que deseo es cuidarte.
Por favor déjame cuidar de ti.
_quiero que me cuides, no te recuerdo, pero siento algo, siento cosas muy fuertes cuando estoy a tu lado.

Lo vi un poco cansado, y le dio un mareo regresamos a la casa, para que descansará.
La niña, nos miraba, me había visto besarme con José, y se sintió mal.
Luego de dejar a José, fui hablar con ella.

_Hola.
_vete
_por favor, escúchame.

_no quiero hablar contigo

_te quiero contar quien es él.

_me contaras la verdad
_si, te contare todo

Comencé a relatarle toda la historia de José, de sus hijos muertos, y de su venganza, de el teniente Javier, que quería atraparlo, como lo conocí, y que solo quería ayudarlo a escapar del Perú con vida, y que iniciara una nueva vida.
Que era un hombre que había sufrido, que ella aun era un linda adolescente, que no tenia por que cargar con ese trabajo, que José, necesitaba encontrarse, consigo mismo, y que tendría que hacerlo en España.

Ella parecía entender.

_espero que el teniente Javier, no los atrape, a ninguno de los dos

_eso espero, tu, has sido muy buena, con José, te has portado de una forma increíble, jamás te olvidara, lo se, convierte en una buena enfermera, eres el orgullo de tus padres.

_lo se, gracias por contarme lo de José, espero que tu y el, sean felices.

_yo también, lo espero.

_yo los ayudare a escapar, los llevare en la camioneta de mi padre.

_no, como crees, no puedo permitir, que te involucres así, de ninguna manera.

_quiero ayudarte, déjame hacerlo, además quiero despedirme de José, cuando suba al avión.

_yo hablare con tu padre, no are nada sin el consentimiento de tu padre.


Así pasamos un día mas en aquella finca, ya era de noche, teníamos todo planeado, para salir, Don Jacinto me presto la camioneta, y me llevaba su cuñado, pero no quiso que la niña, viniera con nosotros.


La niña se había quedado muy triste, pero cuando José se despidió de ella, lo abrazo, y le dio un beso en la cara.
Creo que ese fue el momento más dulce para ella, y que nunca olvidaría a José, yo también me despedí de todos, agradeciendo por todo.

En la camioneta le pedí a José, que agachara a cabeza, por que no quería que algunas personas lo vieran.

_ ¿por que tengo que esconderme, por que, Janet?

_no es esconderte, es por seguridad, hay un grupo de terroristas que quieren matar a los turistas, y te pueden reconocer, por como eres tu, vale, no quiero que nada suceda.

_vale

Llegamos por fin al aeropuerto, eran casi las 5 de la madrugada, nos despedimos del conductor, y caminamos al terminal.

Fui a preguntar si habían llegados mis maletas.

_por favor señorita, me dice si han llegado mis maletas.
_si un momento, su nombre
_Janet García.
_señorita Janet, sus maletas ya llegaron, y una persona la esta esperado en la cafetería.

Cuando me dijo esto, me preocupe, seguramente era Javier, tenia que dejar a José, en otro lugar.

Mas allá había, un grupo de turistas, recordé que José, hablaba Frances, también lo abra olvidado, le pedí a José, que estuviera cerca de ese grupo, que me esperara ahí sentado.

Me fui a cafetería a ver quien era, efectivamente era, Javier, traía una caja en las manos
_Janet donde te has metido, me has tenido todo el día buscándote.

_estaba con unos tíos, en casa de ellos.

_mira, aquí esta la carta de inocencia de José, es una copia la original, viaja con el cuerpo, para los familiares. Aunque eso demorara un poco mas, parece que no tenía familiares que recogieran el cuerpo, el gobierno español, se encargara de todo.

_gracias, te lo agradezco, no debisteis molestarte
_por que me dijisteis que te ibas al medio día, si salías, alas 6 de la mañana Janet.
_por que no tenía confirmado la hora del vuelo, ya sabes que aquí hay un servicio deficiente.
_ya
_bueno a hora debo subir a mi avión o se ira, sin mi.
_sabes que Janet, se me ha perdido, un pasaporte de José.

_así, pues que raro, como así se te perdió.

_pues yo creo que lo tomaron de mi escritorio.

La situación estaba muy tensa. Empezaba a ponerme nerviosa, Javier, me ponía muy nerviosa, y de reojo miraba a José, que estaba esperándome sentado, haciéndome gestos, y yo trataba de ignorarlo.

_estas nerviosa Janet, te pasa algo.

_si claro un poco nerviosa, no me gusta mucho viajar en avión sabes, tengo vértigos
_ya.

Esa mirada impaciente de Javier me helaba por dentro, me ponía los pelos de punta, estaba ya sobre la hora de subir al avión, cuando vi que José, se levantaba de donde lo deje sentado, ya no tenia la venda en la cabeza, se lo había quitado, se había puesto un gorro, pero no sabia bien que es lo que hacia.

Estaba caminando con dirección a donde estábamos nosotros, Javier lo reconocería, por que aunque nunca lo vio de cerca, si lo había visto en videos y fotos. Y era muy probable que lo reconociera en cuanto lo viera.



Ya estaba todo perdido, José se acercaba mas y mas, en cuanto estaba muy cerca, se detuvo, se quedo mirando unos niños que jugaban, dejo de mirarme, y fue hacia los niños.

Javier no se había dado cuenta de nada, seguía sentado en la mesa de espaldas a José, y me miraba.

_Javier, acompáñame, ya tengo que subir a ese avión.

Me iba caminado, pase por detrás de José que al pasar por su lado, le toque lentamente los cabellos, y le hice un gesto que me siguiera. Saque de mi bolsillo su pasaporte y su pasaje. Y lo deje caer en sus pies.

Seguía caminando con JAVIER, EL NO SE HABIA ENTERADO de nada, solo podía acompañarme hasta aduanas.

José, venia detrás, al pasar por el lado del teniente Javier, se tropezaron pero José, no lo miro, siguió caminando, hasta llegar a los controles de aduanas, yo lo esperaba mas allá. Entrego su billete y su pasaporte, y logro entrar.

Javier habría caminado unos cuantos metros, mas y volteo a mirarme, pero en cuando me miro a los ojos, que no dejaba de mirar a José, supo que se trataba de el.

Empezó a correr, yo tome las manos de José, y corrimos hacia el avión, ya nos habría descubierto, aun estaba algo lejos, y era la última llamada el avión despegaría en breve.

Cuando corría, vi entre la gente a Don Jacinto, y a la niña, que nos habían ayudado, me sonrieron y hicieron de todo, para entretener a Javier, que gritaba

_detengan ese avión soy el teniente de la Policía Nacional, no dejen que ese avión despegue

José y yo subimos al avión, esperando un milagro.

Vimos como el avión alzaba vuelo, rumbo a lima, que quizás es donde nos atraparían.

Yo sabia que en ese momento, en el que José, se quedo mirando a los niños, había recuperado la memoria, lo supe al ver sus ojos, y la expresión de dolor.
Ya había recuperado la memoria, a hora solo tenia que escapar, pero como escaparíamos.

sábado, 27 de marzo de 2010

Camino a Monterrey XLI (3CAPITULOS FINALES)

Huaraz, tendría una fiesta las calles las estaban adornando de serpentina y un gran pasacalle, se iba a celebrar, allá afuera, tuve una idea, aunque no sabia bien si aun me estaban siguiendo, decidí, comprarme una peluca, un disfraz de payaso.

A hora si estaba irreconocible, había dejado ya todo, mi equipaje en listo, con indicaciones en recepción del hotel, que me lo enviaran al aeropuerto, al día siguiente.
Con Salvador, acordamos cada uno viajar por su lado, el quería bajar en bus, así se quedaba en Chavin de Huantar, una ciudadela PRE hispánica. Me despedí de el, diciéndole:
_voy a pasar la noche con unos familiares, y mañana partiré a lima, nos vemos en el trabajo.
Subí con una pequeña mochila a casa de Don Jacinto, pero iba disfrazada de payaso, los niños me rodeaban y me hacían bromas, pedían que les diera las manos, o hiciera trucos para ellos, ya me lo habían advertido, así que tenia conmigo una bolsa de caramelos, que repartía a los niños que se me acercaban.
Estando en la plaza, mirando siempre, buscando a los hombres de Javier, ya sentía que nadie me vigilaba, hasta que los vi, aparcados dentro de una camioneta roja, no se dieron cuenta que era yo, hasta pase por su lado, y no lograron identificarme, poco a poco, avanzaba hasta la subida al camino.

Al fin logre dejar Huaraz atrás, y ya no habían niños siguiéndome, ni gente mirándome, a hora, tenia que subir, y tenia que pedirle una vez mas, que me ayudara a bajar a José, en la camioneta.

Entre los follajes del camino, me volví a cambiar de ropa, tenia debajo mi vaqueros y mi ropa de camino. Guarde dentro de la mochila la ropa de payazo, y subí, aunque aun quedaba en mi cara algo del maquillaje.

A hora sabia que los policías de Javier, aun seguían vigilándome, llegue ala finca, casi 2 horas después, muy agotadas, en cuanto me vieron los hombres que trabajaban para Don Jacinto, me abrieron la puerta, me dieron agua, y pude por fin entrar a ver a José.




Antes de ir a verlo, me fui a lavar la cara, al entrar al cuarto, lo vi ya de pié, mirando por la ventana, lo habían trasladado a otra habitación. Tenía ropa nueva, y una venda limpia, la verdad la niña, lo cuidaba muy bien, ella me miro, y me dijo:
_el aun no recuerda nada, seria bueno, que no lo forzara.

Nos quedamos solos en la habitación, ella se fue, y yo corrí a abrazarlo.

_José.
_no recuerdo mi nombre. Me llamo José.
_no, te llamas Ramiro, pero yo te puse José, por que te parecías a mi padre.
Mentí en ese momento, no podía decirle mas, aun estaba muy delicado, y como bien dijo, la niña, tenia que ser cautelosa, para que vaya recordando todo poco a poco.

_quien soy; pregunto José

-Un amigo mío, eres de España, viniste al Perú, de turismos, y tuvisteis un accidente.
_tu tienes mi pasaporte
_si, lo tengo yo, yo te llevare a España, y buscaremos a tu familia allá.
_Por que no estoy en un hospital. Quienes son esta gente.

_tranquilízate vale, aquí tengo tu pasaporte, ya he comprado los pasajes regresamos a lima, puedes viajar.

_creo que si, aun me duele un poco la cabeza, pero estoy bien.
Recuerdo una explosión, que sucedió.

_pues parece que hubo un atentado, contra el grupo de turismo, en el que veníamos los dos, yo estaba ahí también, pero a mi no me paso nada, te trajimos aquí por que no se te podía mover, por el golpe en la cabeza, pero ya te vio un medico. Y dijo que pronto recordaras todo.

_esta gente ha sido muy amable, me han prestado ropa, quiero agradarles antes de irnos.
_tienes tiempo, nos iremos por la noche.
José, no podía reconocerme, me sentía triste por eso, quería tanto besarlo y abrazarlo, decirle mi amor, por fin, estas bien, te amo, quería decirle tantas cosas, pero no era el momento, y sentía que me miraba con desconfianza, como si dudara de mis palabras.

_Janet recuerde a 2 niños. ¿Tengo hijos?
_no, pero quizás sean sobrinos tuyos. No te esfuerces en recordar las cosas.
_quisiera caminar un poco, podemos salir.
_claro que si, caminemos un poco, pero si te sientes mal, regresamos vale.
_esta bien.

_es una lastima, a ver llegado a un lugar tan lindo, como Perú, y no recordarme nada de mi viaje.
_no te preocupes ya volverás a venir.
_¿tengo dinero?
_creo que no, pero yo si tengo algo de dinero, dime, necesitas algo. Quieres comprar algo.
_si, quisiera agradecer a esta familia, con algún obsequio.
_no te preocupes, ellos tienen de todo, solo les hace falta, que estés bien, no creo que haya falta de comprarles algo.
_no te recuerdo, Janet, pero eres muy buena, y linda.

En cuanto me dijo eso, me puse roja, quería abrazarlo, y lo tome de la mano.

_cuéntame Janet, que somos tú y yo
_amigos, de momento solo amigos.
_siento, algo muy especial, cuando te tengo cerca, estaba inquieto, y cuando te vi, sentí paz, tú eres esa paz. No se como explicar.

_lo se, yo al verte sentí lo mismo, una alegría infinita de verte ya levantado, y a hora mismo, de verte aquí caminando conmigo, es increíble.

José, se acerco, y no pude controlarme mas, esta vez, era yo quien lo besaba apasionadamente. Y sentí que correspondía a mis besos, me abrazaba con fuerzas, sus labios dulces, mientras lo besaba, se me caían las lagrimas, lo creía muerto, estaba aquí, conmigo, cuanto tenia que agradecer a la vida, a la virgen, quería que nunca acabara ese beso, solo quería seguir besándolo, y seguir pegada a su piel, a su cuerpo.

martes, 23 de marzo de 2010

Camino a Monterrey XL ( 4 CAPITULOS FINALES)

Al día siguiente, me había quedado dormida, ya eran casi las 10 de la mañana, me aliste, y Salí de inmediato, a buscar a José, antes tenia que pasar por la agencia y comprar los pasajes de regreso a lima, creo que José si podrá hacer el viaje, además en avión desde Huaraz, solo demoraba 40 minutos para llegar al aeropuerto Jorge Chávez. Ya Salvador, me diría si salía con nosotros o regresaba por su cuenta.

Luego me adelante a Javier y fui ala delegación del ejercito sabia que lo encontraría a ahí,

_hola Javier, he venido a identificar el cadáver de José
_no te esperaba, Janet pero me alegra que lo hicieras, ya me estaba inquietando tu comportamiento
_por que, por que te pedí, una constancia donde hable de la inocencia de José,
Sabes muy bien, que no es un terrorista, que no estaba con esa gente, te di ese video, y veo que no le das la importancia que de verdad tiene.
_ya lose, pero igual tenia intenciones de cargarse a toda esa gente.

_por que estaba dolido, por que mataron a su familia, ya se que no tienes hijos, pero ponte en su lugar, tu que hubieras hecho, el solo buscaba justicia con sus manos, aunque estaba equivocado.

_tienes razón, pediré ese informe hoy mismo, y te lo daré, al medio día.
A hora acompáñame para que identifiques el cadáver.

Mientras conversaba con Javier, vi sobre el escritorio, los pasaportes que antes ya me había mostrado. Pasaportes que había utilizado José, para viajar a diferentes lugares.

Necesitaba uno de esos pasaportes, entonces intente que Javier, se distrajera

Empecé a toser, y acalorarme.

Fuss que tos, me siento un poco mareada.

_que te tienes Janet.
Me deje caer sobre los brazos de Javier.
_Janet que tienes
_no se no puedo respirar (tosía mas fuerte y respiraba con dificultad)
_déjeme ayudarte. (Me hacia masajes en el pecho)
_necesito agua Javier
_si, claro, espera que te traigo un vaso de agua.
En cuanto se fue, me asegure que la puerta estuviera cerrada, y revise los pasaportes que tenia en una bolsa de plástico, me guarde una en mi cartera y volví a dejar las demás como estaban.

Cuando regreso Javier, seguía fingiendo que estaba mal.
-TOMA JANET A VER SI TE PASA, MUJER
_GRACIAS JAVIER.
_me siento mal, podrías llevarme a mi hotel, no creo que en estas circunstancias pueda ver a hora el cadáver.
_claro, ya mañana a ver si logras identificarlo.
Gracias Javier, quiero que sepas que lo único que deseo es que entiendas que José, no era un mal hombre, solo estaba desesperado.
_lo se y lo entiendo, una lastima todo lo que vivió, a hora que descansé en paz, imagino que alguien en España querrá darle cristiana sepultura, por eso es importante que lo reconozcas.

Entonces pensé, en eso que me acaba de decir, si identificaba el cadáver, ya no lo buscarían más, y todo habrá terminado, solo seria un expediente más, y José y yo, podríamos iniciar una nueva vida junta, en algún lugar.

_ya me siento mejor, tienes razón, quiero hacerlo, llévame, e identificare el cadáver.
_estas segura, te pondrás mal, no quiero que te presionas.
_estoy segura, además me regreso a lima, ya no tengo por que quedarme en Huaraz, mi canal me esta llamando.
_lo entiendo, pero no esperaras la constancia para José.
_creo que la mejor confección de su inocencia, es que ya lo hayas reconocido ante mí, eso es muy importante. Lo demás es formalidad.
_vale, pero igual te daré la constancia certificada antes que te vayas, ¿Cómo regresas a lima?
_en avión, salgo mañana, si deseas puedes venir al aeropuerto a despedirme.
_claro que lo are, y te prometo que en cuanto tenga un tiempo, te visitare en lima.

Pasa por aquí.
Caminamos un pasillo largo, cada vez mas estrello, y bajamos una planta, era un sótano.

_es aquí Janet, si no estas segura, lo podemos dejar, vale.
_descuida estoy bien.

Al ingresar un enfermero con tunica blanca, nos salio al encuentro

Venga por aquí teniente Javier.

En una mesa había varios cadáveres, antes de ver a alguno que se pareciera mas al de José reconocí algunos de los hombres que estaban en el campamento en pastoruri.
Casi al final de la mesa, había un cuerpo lo mas parecido a José, blanco, cabellos castaños.

_es este Javier.
_pues ya lo suponía, era el único que no habíamos logrado identificar. Entonces este es José. Te prometo que limpiare su nombre.
_vamos por favor, esto es muy doloroso
_por supuesto, déjame llevarte a tu hotel
_pero prométeme que no intentaras besarme (risas)
_intentare no besarte (sonriente)






Me dejo en mi hotel, sentía que deseaba quedarse a charlar más conmigo, pero yo, solo quería que se fuera de una vez por todas. Aun no había resuelto, como sacaría a José de aquella finca, tenia muchas cosas que hacer pero primero tenia, que hacer que Javier, se vaya sin levantar sospechas.

_cuando te vas Janet?
_creo que mañana regreso en avión.
_bueno, espero que esta vez, si me permitas, despedirme bien de ti.
_esta bien, tengo que reconocer que eres muy insistente, y eso es un punto a
Tu favor, pero por favor, dame tiempo, esto todo lo que he vivido en Huaraz, es muy reciente, me hace daño, en una semana, pasaron muchas cosas.


Javier se fue, en cuanto me quede sola en mi habitación, revise en mi bolsa, el pasaporte que había robado de la oficina de Javier, estaba casi segura, que no lo echaría de menos, al menos unos días, tenia que darme prisa, no sabia si seguía siendo vigilada, así que esta vez tenía que ser muy cuidadosa.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Camino a Monterrey XXXIX (5 CAPITULOS FINALES)


Regreso Salvador y charlamos un poco, le decía a el, que tenia urgencia de regresar a lima, que ya estaba mucho tiempo en Huaraz, que si el decidía regresar conmigo, tendríamos que irnos muy pronto, mas tardar mañana en la noche, quería sacar de noche a José, de aquella casa, llevármelo lejos de todo este sitio, que me ponía muy nerviosa.

Pero aun tenia que saber como haría con lo que el teniente Javier iba a hacer, si me daba, una constancia que José era inocente todo seria mas fácil, pero bien sabia yo que lo que le había pedido, era casi un imposible, pero no importaba, con tal de tenerlo lejos, a hora, que estaba sola, en el cuarto del hotel, meditaba necesitaba llevarme a José fuera del país , no se podía quedar aquí, llame a mi madre en ese momento.


_madre, hola.
_hola hijita, que bueno que llamas, estaba preocupada por ti, por lo que esta pasando en Huaraz.
_madre tranquila, quiero que te calmes
Mira, tengo que salir del Perú, necesito que me prepares una maleta pequeña, que vayas al banco y saques dinero, préstame unos 2000 dólares, por favor.

_hijita, pero dime que pasa, a donde vas a ir.
_madre dime, que me prestaras ese dinero, yo te los pagare lo prometo.
_bien sabes que si cariño, pero dile a tu madre a donde te vas por favor. Que me tienes alarmada niña.
_me voy a España, madre, unos meses, solo de vacaciones.
_vaya España tan lejos.
_necesito ir.
_yo sabia que un día te irías ala tierra de tu padre. Pero dime hijita, te iras a casa de tus abuelos, los quieres visitar.
_si, eso es, quiero estar un tiempo sola, quizás un año, no lo se, pero quiero que tengas el dinero, y mi maleta lista para cuando llegue.
_hijita y cuando llegas?
_lo mas probable es que este allá, en 2 días. Por favor, ten mi pasaporte en la mano, llego y me voy.
_hijita como llegas y te vas, y tú trabajo.
_lo dejo, madre, lo dejo todo. Solo quiero ir a España.
_hija, es por un hombre?
_si madre. Es por un hombre. Sabes bien que jamás cometería un acto así, pero esta vez, no dejare escapar la felicidad, voy a luchar por el y por mi.
_esta bien mi pequeña. No te preocupes, yo arreglo todo, ya eres una persona adulta y sabes lo que haces, solo quiero que sepas que siempre puedes contar conmigo, ese muchacho, debe ser muy especial, e importante, pero aun si no lo fuera, tu estas madurando y aprenderás que el amor, es un sentimiento muy poderoso, Me hubiera gustado decirte esto en persona, pero se que estas decidida en tus cosas y no debo interferir, estaré esperando tu llegada, y te despediré en el aeropuerto mi niña.
_madre haz reservas de avión, para 2, en el primer vuelo que salga a Madrid.

Esa noche dormí mas tranquila, sabia que podía confiar en mi madre, ella me ayudaría en este viaje. Con lo de la visa no había problemas no era la primera vez que había viajado al extranjero, y entraba y salía del país, a hora quien me preocupaba era José, como lo sacaría, aun faltaban sus pasaportes y documentos.

lunes, 22 de febrero de 2010

Camino a Monterrey XXXVIII (últimos capitulos)

Regreso Salvador y charlamos un poco, le decía a el, que tenia urgencia de regresar a lima, que ya estaba mucho tiempo en Huaraz, que si el decidía regresar conmigo, tendríamos que irnos muy pronto, mas tardar mañana en la noche, quería sacar de noche a José, de aquella casa, llevármelo lejos de todo este sitio, que me ponía muy nerviosa.

Pero aun tenia que saber como haría con lo que el teniente Javier iba a hacer, si me daba, una constancia que José era inocente todo seria mas fácil, pero bien sabia yo que lo que le había pedido, era casi un imposible, pero no importaba, con tal de tenerlo lejos, a hora, que estaba sola, en el cuarto del hotel, meditaba necesitaba llevarme a José fuera del país , no se podía quedar aquí, llame a mi madre en ese momento.


_madre, hola.
_hola hijita, que bueno que llamas, estaba preocupada por ti, por lo que esta pasando en Huaraz.
_madre tranquila, quiero que te calmes
Mira, tengo que salir del Perú, necesito que me prepares una maleta pequeña, que vayas al banco y saques dinero, préstame unos 2000 dólares , por favor.

_hijita, pero dime que pasa, a donde vas a ir.
_madre dime, que me prestaras ese dinero, yo te los pagare lo prometo.
_bien sabes que si cariño, pero dile a tu madre a donde te vas por favor. Que me tienes alarmada niña.
_me voy a España, madre, unos meses, solo de vacaciones.
_vaya España tan lejos.
_necesito ir.
_yo sabia que un día te irías ala tierra de tu padre. Pero dime hijita, te iras a casa de tus abuelos, los quieres visitar.
_si, eso es, quiero estar un tiempo sola, quizás un año, no lo se, pero quiero que tengas el dinero, y mi maleta lista para cuando llegue.
_hijita y cuando llegas?
_lo mas probable es que este allá, en 2 días. Por favor, ten mi pasaporte en la mano, llego y me voy.
_hijita como llegas y te vas, y tú trabajo.
_lo dejo, madre, lo dejo todo. Solo quiero ir a España.
_hija, es por un hombre?
_si madre. Es por un hombre. Sabes bien que jamás cometería un acto así, pero esta vez, no dejare escapar la felicidad, voy a luchar por el y por mi.
_esta bien mi pequeña. No te preocupes, yo arreglo todo, ya eres una persona adulta y sabes lo que haces, solo quiero que sepas que siempre puedes contar conmigo, ese muchacho, debe ser muy especial, e importante, pero aun si no lo fuera, tu estas madurando y aprenderás que el amor, es un sentimiento muy poderoso, Me hubiera gustado decirte esto en persona, pero se que estas decidida en tus cosas y no debo interferir, estaré esperando tu llegada, y te despediré en el aeropuerto mi niña.
_madre haz reservas de avión, para 2, en el primer vuelo que salga a Madrid.

Esa noche dormí mas tranquila, sabia que podía confiar en mi madre, ella me ayudaría en este viaje. Con lo de la visa no había problemas no era la primera vez que había viajado al extranjero, y entraba y salía del país, a hora quien me preocupaba era José, como lo sacaría, aun faltaban sus pasaportes y documentos.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Camino a Monterrey XXXVIII (últimos capitulos)

Después de ese suculento plato, me reanimo bastante y me sentí con fuerzas suficientes para bajar el camino a pie, ya no tenía ni dudas, tendría que bajar lo más rápido, para llegar a tiempo con Javier.

Ya habría avanzado casi la mitad del camino, me habían señalado por donde tendría que bajar, para cortar camino, sin entrar ala carretera que era, mas seguro pero mucho mas largo, yo estaba haciendo el camino de los senderistas, y el que usaba toda la población, antes ya había llovido el camino estaba resbaloso, pero esta vez estaba preparada, con mis botas de plásticos, y chamarra para lluvias, aunque el sol brillaba, me habían aconsejado ponérmela, igual yo sentía un poco de frío aquí, que estaba cómoda, seguía bajando con precisión cada peldaño, piedras que había que ir tentándolas, antes de pisar, ya que se podían desprender, eso me lo enseño mi padre, en las expediciones de cuando niños solíamos hacer, en fin, ya podía ver los tejados de las casas de la ciudad de Huaraz, faltaba poco ya. Por fin había logrado bajar toda esa pendiente mirando hacia arriba, parecía imposible una gran hazaña, haber bajado por aquél camino, pero cuando ya te internas, se ve un poco mas fácil.

Cuando salía ya del camino oculto, un grupo de turistas senderistas, comenzaban a subir, nos quedamos mirando, y como es típico en ellos, saludan todos, diciendo

_ HOLA HOLA HOLA, PEROU WONDERFULL, ITS BEUTIFULL.

_si, ya, go go, for here

Ahí estaba yo, masticando unas ingles deprimentes entre esos amigos extranjeros. Jejejeje bueno todo me parecía bonito aun me acompañaba la alegría de a ver encontrado a José.

En cuanto toque pista firme, tome un taxi,
_por favor al hotel Savoy.

En 10 minutos estaba ya en el hotel, y mi camarógrafo no se encontraba como siempre.
Me di un baño, y espere a Javier. Ya eran cerca de las 2 de la tarde, que raro, que no haya llegado aun, pero igual a hora tendría que ver como podría sacar a José a de aquel lugar, y llevármelo a lima.

toc toc, la puerta

_adelante.

_ Hola Janet.

_Te esperaba Javier, que deseas de mí.

_Primero decirte que estas hermosa, te encuentro diferente, como radiante, y …

_que dices, Javier, a eso viniste a decirme que me encuentras bella.

Javier se acerco hasta a mi, tomo mi mano, y me dijo,: _Janet, por que no puedes amarme, como yo te amo, a ti.
_que dices, Javier, yo creía que ese asunto había quedado claro, no, no

Sin antes que pudiera hacer nada, otra vez mas Javier me beso ala fuerza.

Parecía que ponía mucho sentimiento en ese beso, y la verdad que me deje llevar, estaba tan contenta por lo de José, que al sentir sus labios, me deje llevar, y correspondí a sus labios, besándolo con pasión, pero mi mente estaba puesta en José. Hasta que me di cuenta de lo que estaba haciendo y con todas mis fuerzas, lo aparte de mí.

_BASTA… POR QUE SIEMPRE TIENES QUE BESARME. por que no puedes dejarme, Javier, yo no te amo, no te quiero, por favor no insistas mas.

_pero correspondiste a mi beso, se que te agrado, no me lo niegues Janet.

_no. No pensaba en ti, cuando te bese. Ya sabes en quien pensaba.

_pero si esta muerto, esta muerto, no te aferres a un recuerdo, yo te ofrezco un amor sincero.

_ Un amor obligado, un amor que impones a tu voluntad, y eso tampoco me agrada., si para eso has venido, quiero que te marches a hora mismo.

_no, he venido para que reconozcas el cadáver de José, solo tu has tenido contacto con el, y a hora debes reconocerlo, no estas obligado hacerlo, pero facilitaría muchos trasmites. Así, que tu decide, si puedes hacer esto. Y con esto espero que de una vez por todas te olvides de ese maldito terrorista.
-no es un terrorista, acaso no vistes el video que te di. José no pertenecía a esa banda de criminales, no permitiré, que eches mas basura sobre nombre, y solo te voy a ayudar, si reconoces formalmente que José, no era un terrorista, si una persona desesperada, que quería hacer justicia con sus propias manos, pero al final, murió en la emboscada, quiero ese papel, firmado por ti, y por el alto mando, y solo así, iré a hacer el reconocimiento del cadáver.

_primero tienes que verificar que se trata de José. Luego te daré ese escrito.

_me crees tan ingenua, no Javier, primero dame el escrito, si no ya puedes ir haciendo las gestiones a través de la INTERPOL para que lo reconozcan, situación que creo que te llevara mas 3 meses eh, tu dirás.

_tengo que hablar con mis superiores. Pero hay algo en ti, algo extraño, que aun no logro entender, algo cambio, que es Janet.

Ahí si me puse nerviosa, Javier era un buen policía, olía a distancia las mentiras, quizás ya me estaba analizando sicológicamente, a lo que trate de conservar la calma, para que no, notara mis nervios.

_nada cambio, déjame tranquila, y no quiero que me vuelvas a besar.

_volveré mañana Janet, recuerda algo, aun mis hombres pueden volver a seguirte, algo en ti cambio, y quiero saber que es.

Eso fue una advertencia bastante intimidante, me sentía presionada, a hora como regresaría con José, creo que por el día de hoy, seria mejor no volver mas, además yo sabia que la jovencita estaría encantada de cuidarlo, sin tenerme cerca, a hora era tiempo, de preparar todo para llevármelo fuera de Huaraz, fuera del país si era necesario.

jueves, 11 de febrero de 2010

Camino a Monterrey XXXVII (últimos capitulos)

Ese día no me despegué de la cama de mi querido José, lo había encontrado, y no quería separarme de el, no volvería a perderlo, pero sentía una tensión en la casa, murmullos fuera del dormitorio, gente trabajando en aquella granja, estaban muy cerca, los corrales de los animales, no importaba nada, todo aquello me parecía una maravilla, estaba experimentando un elíxir de gratitud, con la vida, con el cielo, con las montañas, con los animales, todo a mi alrededor era felicidad, tanto que me había olvidado de mi camarógrafo.

Una vez mas el móvil, me devolvió a esa otra realidad.

_Janet, donde estas, te he estado llamando el teniente un tal Javier, ha venido a buscarte al hotel, me dijo que era importante que vendría esta tarde.

_si, yo voy y ahí te lo explicare todo, por favor, no le digas nada, que no sabes a donde me fui.

_pero si esa es la verdad, no se donde narices estas, mira mejor será que estés aquí para cuando ese teniente regrese, no me gusta como me habla.

_yo estaré ahí, vale

A hora que quería Javier, no podía dejar que se enterara de que José, estaba con vida, tenia que pensar las cosas, nadie tenía que saber que lo tenia aquí, con vida.
Apenas podía comer, y casi no me reconocía, le tomaba la mano, le hablaba, pero no le llamaba ni Ramiro ni José, me invente un nombre algo mas norteamericano. Lo llamaría Stewart.

Tenía que volver al pueblo, pero no podía bajar en la camioneta, si alguien me veía bajando con ese coche, en un instante darían con el paradero de José.
Tenia que bajar a pie, y era un camino muy largo, en cuanto vi., que José ya estaba mejor, lo deje durmiendo, y me dispuse a salir al pueblo.

_señorita coma algo, no ha comido nada desde ayer. Me decia la dueña de casa.

_es verdad señora, no me había fijado, pero a hora que lo dice usted, tengo hambre.

_pues vengase ala cocina señorita, le mandare a servir algo.

Era la primera vez que entraba en la cocina de aquella finca, un fogón muy grande desprendía un olor a pan recién horneado, mis intestinos comenzaron a rugir por dentro.

Me senté en una banca, cubierta de mantas multicolores, había más de 3 mujeres en la cocina, todas ellas muy amables, mirándome y sonriéndome al mismo tiempo. Una que parecía era la jefa de todas, las mandaba a seguir con sus labores.
Mientras me traían un plato repleto de cancha tostada, la otra me ofrecía un café, luego me sorprendieron con un plato enorme de caldo de cabeza. Hasta una orejita pude ver en el plato, mucha carne, mote, mondongo, culantro picado y orégano, le daban a ese caldito un aroma especial.

Cuando empezaba a comer, entro en la cocina la hija de ellos, la muchacha estudiante de enfermería. Me miro, desvío la mirada, y le dijo a su madre:

-Yo comeré afuera.

A lo que la madre respondió en quechua. Algo que no entendí. Pero por el tono, no gusto nada a la jovencita. Me sentí que estaba siendo una situación incomoda, tendría que llevarme pronto a José de aquel lugar, pero a donde, mientras me comía el caldito, pensaba a donde me llevaría a José, a donde ¿??

sábado, 30 de enero de 2010

Camino a Monterrey XXXVI (llegando al final)

Mi alma esta feliz, no estaba muerto el hombre que amo, que pensé que lo había perdido para siempre, estaba con vida, tenia la posibilidad de salvarlo, quería hacerlo, no importaba nada, solo él, solo mi amor José, que lo amo con todas mis fuerzas, y voy a luchar a hora por salvarlo, y por hacer que sea feliz a mi lado, no había mas dudas en mi alma, mi corazón estaba tranquilo, podía escuchar los latidos que esta vez sonaban con mas fuerzas, cuando pronunciaba su nombre.

_señor, présteme su camioneta, para ir a traer al medico, por favor, yo pagare todos los gastos.

_señorita, llévese mi camioneta, traiga algún doctor, los encontrara en la clínica Sánchez, diga usted que es para Don Jacinto Huaman, y ellos sabrán, vaya usted deprisa, desea usted conducir o llamo al mi cuñado, el flaco.

_Aun no me conozco bien el camino, no le importaría si su cuñado, me lleva por favor.

_Claro que no, Amelia, hijita llama a tu tío.

La muchachita me miraba con desconfianza, y casi podía entenderla.
Pero quise aprovechar para preguntar algo a don jacinto.

_ ¿por que su hija, me mira así?

_ella siempre ha sido muy desconfiada, pero desde ayer no se despega de la cama de este muchacho, y aunque lo único que ha dicho es su nombre, Amelia, lo atendió con dedicación.

_es muy bondadosa, será una buena enfermera, me preguntaba, si tendría agua para que me invite.

_si, un momento que se la traigo, o si usted prefiere, pasa ala cocina a comer algo.

_no, solo el agua por favor, además quiero estar a su lado. Yo lo daba por muerto.
_murieron varios, pero se que otros se han salvado, a su amigo lo encontramos muy golpeado, lejos de ese lugar.

Le tome las manos a don jacinto, queriendo demostrarle todo mi afecto, y todo mi cariño, lo mucho que le estaba agradecida.

sábado, 16 de enero de 2010

Camino a Monterrey XXXV (llegando al final)

Se veía decidido, a decirme todo de una vez, me hizo entrar por una puerta pequeña, que conducía a un pasaje largo, varios cuartos alrededor, y me conducía al final, una habitación oscura, con una solo una ventana a media luz, limpia pero siempre con ese olor característico de la sierra, mantas gruesas sobre la cama, cubrían un hombre que se encontraba acostado, con la cabeza media vendado, con vendas hechas no precisamente por un medico si no mas, por manos inexpertas, un olor fuerte alcohol, en el cuarto y agua ardiente.

_que es esto (pregunte)
_este hombre solo menciona su nombre, señorita, lo recogimos ayer después de la explosión, no ha querido que lo llevemos a Huaraz.
Mi corazón se me salía del pecho, era JOSE, era el, aunque estaba vendado hasta la nariz reconocía sus labios delgados, era el, no tenia ninguna duda, corrí a arrodillarme frente a su cama, le tome la mano, estaba helado, estaba muriéndose. Habría perdido mucha sangre, tenía un golpe en la cabeza que es la que mas sangraba.
_ ¿lo conoce usted señorita?
_si, es un amigo mío. Tenemos que llevarlo al hospital.
_yo, pensé que el podría ser uno de los terroristas, por que no quiso que lo lleváramos al hospital, mi hija lo ha estado atendiendo, ella estudia enfermería.
_no es un terrorista…pero aquí, se morirá, necesita medicamentos.
_lléveselo usted señorita, aquí no lo quiero tener mas, le daré mi camioneta para que los lleven a donde quieran.

En el cuarto entro la muchacha del auto, y se opuso, a que lo levantemos,

_no se lo llevara de aquí.
_necesita un medico.
_No, el solo necesita descansar, yo le estoy atendiendo, si lo movemos podría ser peligroso, no dejare que te lo lleves.

La vi. Tan decidida, tan entregada en su propósito de cuidarlo, que hasta sentí vergüenza de mi misma, al no tener esa misma determinación, una niña de apenas 16 años, me estaba dando una lección.

_esta bien, no me lo llevare, pero déjenme traer un medico, por favor, no les causare ningún problema.
El padre el señor jacinto intervino, diciendo:
_Esta bien, traiga medico aquí, pero no diga a nadie mas, por que si esta complicado, también mi familia, lo estará.
_No se preocupe, a hora mismo, me voy a traer un medico, a Huaraz.